Los colores del incendio
Fecha: 03/01/2024
En 1954 François Truffaut publicó su seminal ensayo “Una cierta tendencia del cine francés” en el que denunciaba el convencionalismo de la cinematografía de su país, esclerotizada por una industria que adaptaba académicamente prestigiosas obras literarias con estéticas y patrones caducos; un cine “ilustrador” carente de imaginación formal que denominó como “la tradición de la calidad” para terminar apodándolo con el mucho más peyorativo término de “cine de papá”. A pesar de las profundas, radicales consecuencias que supusieron este y otros textos para el arte cinematográfico y su posterior desarrollo contra el clasicismo normativo, es innegable la pervivencia de aquellas formulaciones pretéritas en una industria tan poderosa como la francesa.
Los colores del incendio adapta la segunda entrega de la celebrada trilogía Los hijos del desastre (inaugurada con un premio Goncourt) de Pierre Lemaître, responsable del guion. Clovis Cornillac –delante y detrás de la cámara– no oculta la operación comercial de narrar la brutal caída de la heredera del imperio Péricourt por traiciones de su entorno y su meditada venganza (a la manera de Alexandre Dumas) con una puesta en escena bastante estándar: clásica y lineal pero también discreta a pesar de algún gesto grandilocuente. Un cuidado diseño de producción, buena dosificación de giros argumentales y eficaces intérpretes convierten el film en un entretenimiento popular a la antigua. Poco más y nada menos.